Una célula es la unidad morfológica y funcional de todo ser vivo, siendo la estructura de menor tamaño que puede considerarse vivo. Es capaz de realizar por sí misma las tres funciones vitales: nutrición, relación y reproducción. Todos los organismos vivos están formados por células. De este modo, puede clasificarse a los organismos vivos según el número de células que posean. Algunos organismos microscópicos, como las bacterias y los protozoos, son unicelulares, lo que significa que están formados por una sola célula. Las plantas, los animales y los hongos son organismos pluricelulares, es decir, están formados por numerosas células que actúan de forma coordinada.
Todas las células están rodeadas y separadas de su ambiente exterior por una membrana con una permeabilidad selectiva llamada membrana plasmática, que define los límites de la célula, su perímetro celular, actuando como una barrera que separa su contenido interno (el citoplasma y núcleo) del medio externo. La membrana plasmática es la envoltura de la célula, la bicapa lipídica que delimita a todas las células. Es una estructura laminada formada por fosfolípidos, glicolípidos y proteínas que rodea, limita, da forma y contribuye a mantener el equilibrio entre el interior (medio intracelular) y el exterior (medio extracelular) de las células.
Los
fosfolípidos en la membrana forman una bicapa lipídica con las cabezas polares dirigidas hacia
el exterior y las colas
hidrofóbicas hacia el interior de la bicapa, con un espesor de tan
solo una molécula. Químicamente, la membrana de las células está constituida
por una mezcla de materiales grasos y de proteínas,
que confieren a la estructura flexibilidad y resistencia. Está compuesta por
dos láminas que sirven de "contenedor" para el citosol y
los distintos compartimentos internos de la célula, así como también otorga
protección mecánica.
La principal característica de esta
barrera es su permeabilidad selectiva, lo que le permite
seleccionar las moléculas que deben entrar y salir de la célula. De esta forma
se mantiene estable el medio intracelular, regulando el paso de agua, iones y metabolitos,
a la vez que mantiene el potencial electroquímico (haciendo
que el medio interno esté cargado negativamente). La membrana plasmática es
capaz de recibir señales que permiten el ingreso de partículas a su interior.
Entre
las propiedades de la membrana
plasmática tenemos:
- Permeabilidad:
Se refiere a que permite el paso de ciertos compuestos a través de su
superficie con el fin de que estos formen parte de la sustancia celular.
- Selectividad:
La selectividad indica que la membrana permite el paso de ciertas
sustancias que la rodean e impide el paso de otras.
- Pinocitosis:
Se denomina así a la ingestión de líquidos, que son almacenados en
vesículas y luego pasados al citoplasma,
por parte de la membrana
celular.